Tras semanas de confinamiento no solo en España, sino a nivel mundial, tenemos la certeza de que el equilibrio entre nuestra capacidad sanitaria y el COVID-19 llegará. La estabilización será clave para recuperar cierta normalidad. No obstante, es cada vez más evidente que esa recuperación implicará también una transformación en todos los aspectos de la vida cotidiana, inclusive en el sector más afectado por la pandemia, el sanitario.
Los hospitales, los centros de asistencia primaria y todo su personal están siendo nuestra principal defensa contra la pandemia. Una defensa a la que la tecnología está siendo la que dota de herramientas para poder controlar, monitorizar y frenar la enfermedad.
El sector sanitario, que todavía se encontraba en las primeras fases de digitalización, ha tenido que transformarse a marchas forzadas. Sin embargo, esta transformación no dará marcha atrás, tras la pandemia la sanidad se reconfigurará y se adaptará a la nueva realidad post-pandemia.
▶ La importancia de incluir la digitalización dentro de la estrategia sanitaria
Herramientas digitales que combaten la pandemia en el sector sanitario
App para identificar síntomas
En los primeros estadios de la expansión del virus la asistencia sanitaria normalizada todavía era posible. No obstante, conforme aumentaba el número de casos y se profundizó en la viralidad de la enfermedad, las opciones para atender a los pacientes se vieron reducidas drásticamente. Ante las dudas de los ciudadanos, el desconocimiento generalizado y la falta de personal para atenderlos, una de las soluciones digitales puestas en marcha por muchas países han sido las aplicaciones que ayudan a identificar síntomas y explican los pasos a seguir en caso de riesgo real de contagio.
Un asistente digital que ayuda en la gestión y se convierte en el primer filtro para desasturar teléfonos de asistentes y, por supuesto, salas de espera de centros de salud y hospitales.
Teleasistencia sanitaria
Una de las primeras medidas frente a la crisis sanitaria ha sido tratar de evitar brotes y contagios en espacios tan sensibles como los consultorios médicos y hospitales. El cierre de los centros de asistencia primaria ha permitido disponer de personal extra para atender a los pacientes más graves que requieren de hospitalización. Sin embargo, la teleasistencia ha sido clave a la hora de mantener al resto de ciudadanos atendidos ante otras patologías más leves, consultas o renovación de recetas.
Una teleasistencia que también sirve de filtro para atender posibles casos de COVID-19, minimizando así el mínimo contacto del afectado con otras personas y poniendo en sobre aviso al personal para, en caso de interactuar con él, estén debidamente protegidos.
Control de brotes en enclaves críticos como hospitales
Los protocolos de seguridad de todos los centros hospitalarios se pusieron en marcha desde el comienzo de la pandemia para asegurar al máximo control y monitorización de los brotes en hospitales. No obstante, una vez llegado al punto álgido de la pandemia, con casi el 100% de los pacientes del hospital afectados de COVID-19, ese control y monitorización tradicional se ha quedado obsoleto.
La necesidad de información a tiempo real veraz y la posibilidad de identificación de los profesionales y los pacientes más allá de entrevistas con los mismos, es vital a la hora de realizar una trazabilidad eficaz y acelerada de un posible brote.
Ante esta situación surgen herramientas tan vitales como MYSPHERA ATLAS, un APP de trazabilidad digital aplicada a profesionales sanitarios y pacientes.
Una aplicación móvil instalada en los smartphones de los sanitarios que recopila mediante señal de proximidad y tiempo de contacto todas las interacciones con otros profesionales, que portan la app en su móvil, así como pacientes que portan brazaletes de identificación digitales (tags).
▶ MYSPHERA ATLAS (video): Trazabilidad digital para el control de infecciones
RTLS
La tecnología RTLS (Locazación en Tiempo Real) es una herramienta ya conocida e incorporada en el sector sanitario. El sistema de MYSPHERA antes de la pandemia funcionaba ya en más de 50 hospitales del mundo. Una solución que en un situación normalizada permite localizar en tiempo real a pacientes dentro de las diferentes áreas del hospital, así como conocer la ubicación de equipamiento y el estado de los diferentes procesos del paciente. Con la pandemia, esta tecnología adquiere una nueva funcionalidad, conocer las áreas en las que se han ubicado pacientes con positivo en COVID-19, así como el material que ha intervenido en su tratamiento y que podría estar contaminado.
▶ La efectividad de la trazabilidad de los pacientes para evitar contagios
Sin duda, la tecnología ha dado un paso adelante en esta lucha contra la pandemia. Si bien es cierto que no es posible tener la certeza de cómo será la nueva realidad de la sociedad cuando la situación se normalice, sí que se pueden ya vislumbrar las dificultades que tendrá que enfrentar al sector sanitario, como el aumento de las listas de espera.
▶ El desafío de la Sanidad tras la pandemia: Recuperar la normalidad y los procesos habituales
Una coyuntura que debe hacer reflexionar a la sociedad sobre la necesidad de evolucionar el sistema médico actual y aportar el empujón definitivo para invertir en la actualización y la digitalización de procesos que se están revelando como fundamentales para protegernos a todos.