Declarado por la Organización Mundial de la Salud en marzo oficialmente pandemia, el COVID-19 se extiende por todo el mundo, siendo Europa y Estados Unidos los principales afectado en la actualidad.
Sin embargo, China, país donde se originó por primera vez el brote, concretamente en la ya conocida provincia de Hubei, ahora empieza a estabilizar su situación.
Mientras el resto lidia con esta situación de emergencia sin precedentes, el país asiático comienza a levantar las restricciones impuestas a su población y progresivamente intercambia las cifras de afectados por recuperados.
Una experiencia que ha servido ahora para apoyar al resto de países y comunidades en forma de material médico y, lo más valioso actualmente para combatir el virus, conocimiento y experiencia.
Si bien es cierto que ya conocíamos diversas ramas dentro de la familia del coronavirus (CoV) como el MERS-CoV o SARS-CoV, el nuevo brote que surgió a finales de diciembre en China era totalmente desconocido hasta la fecha. El bautizado como SARS-CoV-2 está suponiendo todo un reto global dadas sus características de alto contagio, su falta de tratamiento y su letalidad en ciertos grupos de personas (inmunodeprimidas, personas con otras patologías, …)
Unos elementos a los que ya ha tenido que enfrentarse China y que ahora puede compartir para mejorar tanto la atención a los pacientes como progresar en la lucha contra el virus.
Precisamente, es esa la experiencia que comparte el Primer Hospital Afiliado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zhejiang (FAHZU), a través de un manual creado con el apoyo de Fundación Jack Ma y la Fundación Alibaba.
Una labor pionera tanto en el tratamiento a los pacientes, como en la aplicación de la tecnología en la batalla biológica.
Y es que, sin duda, la sanidad está siendo nuestra mejor defensa contra la pandemia, peros sus recursos son limitados y ahí, precisamente, es donde la digitalización de ciertos procesos puede ser fundamental para ganar la batalla.
Las estrategias tecnológicas llevadas a cabo por el país asiático dentro del ámbito hospitalario son tres:
• La reducción del riesgo de infección cruzada de los pacientes a través de la digitalización de procedimientos como la atención primaria online o citas hospitalarias previamente establecidas online con requisitos a seguir muy claros (hora, medidas de protección, información, etc.)
• Menor intensidad de trabajo y riesgo de infección del personal sanitario con reuniones de personal online, pruebas móviles y remotas a los profesionales, tener acceso constante al estado de salud de todo el personal mediante códigos QR, así como registros electrónicos de los pacientes con sintomatología.
• Respuesta rápida ante las emergencias generadas por el COVID-19 gracias a información disponible a tiempo real de pacientes y profesionales. Así como la capacitación de personal de forma online.
Esas tres estrategias buscan proteger previamente a pacientes y sanitarios dentro del ámbito hospitalario.
Pero, y si aún así existe foco de infección, ¿cómo podemos protegerlos?
➜ Manteniendo el control de todas aquellas personas expuestas al brote dentro del centro.
MYSPHERA ATLAS es una aplicación móvil cuyo objetivo principal es tener a tiempo real una trazabilidad de todos los contactos con los que ha interactuado un sanitario. Una APP que funciona de forma pasiva registrando las señales emitidas tanto por los smartphones de compañeros como de las pulseras identificativas de los pacientes. De modo que cada sanitario tiene un registro todas las personas con las que ha interaccionado a lo largo de su jornada.
En caso de que exista un paciente positivo dentro del centro, a través del registro generado por la APP podremos saber todas aquellas personas que han estado expuestas, tanto personal sanitario como otros pacientes. De este modo se podrán llevar a cabo los protocolos adecuados para su aislamiento.
Se trata de una herramienta de gran valor no solo para cada profesional médico, sino también para el equipo de control de infecciones encargado de este tipo de situaciones en cada hospital.
Ante circunstancias de brote infeccioso, los pasos a seguir tradicionales pasan por los registros manuales del personal y una entrevista con la persona afectada que informa de sus movimientos. Un sistema con poca precisión y fiabilidad.
Ante el mismo escenario, con MYSPHERA ATLAS y su trazabilidad digital se puede obtener toda la información al instante y de forma exacta, pudiendo llevar a cabo los protocolos necesarios de la forma más rápida y adecuada posible.
En situaciones de emergencia sanitaria como la actual, es vital actuar con celeridad y certeza a la hora de proteger un pilar fundamental para la población, el sistema sanitario.